Desde hace tiempo varios colegas insisten en que me anime a utilizar alguna de las aplicaciones de móvil diseñadas para el naturalista. Los más jóvenes han nacido ya con Internet y con smartphone, así que para ellos es normal vivir pegado a ese aparato, pero yo tuve mi primer ordenador y conexión a Internet con 35 años. Por tanto mi adaptación a esa tecnología no es la misma.
Ayer, tras escuchar la videoconferencia organizada por el Grupo Naturalista Hábitat impartida por Damián Romay acabé de animarme y esta mañana me acercaba hasta Covas para dar un paseo y probar Observation, la aplicación que mejor se adapta a mis necesidades:
Pantalla inicial al abrir la aplicación
Supongo que estas aplicaciones han nacido para centralizar la información de las "listas de aves" que sacan los "birders" y que causan furor en los países anglosajones desde hace décadas (recientemente se ha puesto de moda aquí también). Sin embargo se han desarrollado de manera que puedan servir como herramienta en eso que se llama "ciencia ciudadana" y también a los investigadores profesionales.
Parte de "mi primera lista"
Tras un par de días anticiclónicos esta mañana amanecía desapacible, con un viento moderado bastante molesto y frío. Algo que limita mucho la observación de bichos. Hoy casi fue mejor así, porque el uso de estas aplicaciones implica perder mucho tiempo con la mirada en el teléfono y anotando cosas, sobre todo el primer día. Con la práctica supongo que se hará todo más fluido.
Paisajes de Covas (Ferrol)
Por aquello de anotar un poco de todo visité una pequeña charca.
Encharcamiento estacional
Tritón ibérico (Lissotriton boscai, izda) y palmeado (L. helveticus, dcha)
Una de las opciones que tiene disponible esta aplicación es la de añadir audios o fotografías, que puedes subir desde otro dispositivo o fotografiar directamente con el móvil. Como no sé pasarlas por bluetooth desde la cámara yo tengo que hacer una captura con el teléfono sobre la pantalla de la cámara. Esto será importante cuando el observador no tenga mucha experiencia o se trate de una especie de identificación complicada. Después los revisores de Observation se encargarán de aceptarla, rechazarla o modificarla.
Cargando imagen en la observación
Me atreví a subir alguna cita de plantas, campo del que sé muy poco, aunque al Juncus acutus lo conozco bien desde niño (como pincha!)
Subiendo cita botánica
Tras esta primera prueba debo reconocer que estas aplicaciones son muy divertidas y le dan un nuevo enfoque a las salidas por estos sitios aburridos donde apenas hay bichos, como era este camino en una fría y ventosa mañana de Noviembre. Pero en espacios naturales con mucha biodiversidad como el Delta o Arribes no me imagino estar anotando en el móvil, sinceramente (y perdiendo mucho tiempo de disfrutar las vistas).
En las próximas semanas o meses voy a utilizarla, especialmente en mis paseos a pie. Ya veremos si al final me adapto o no. Desde luego y para los muchos observadores jóvenes que no hacen anotaciones en cuaderno de campo pues es una herramienta estupenda, que ayudará a que sus observaciones sirvan para algo. De hecho las bases de datos de Observation o ebird mueven ya cifras de millones de citas.
"Vacas marinas" ferrolanas
Todo será probar durante un tiempo. Pero siempre me acuerdo de un holandés bastante mayor que conocí hace unos años en el observatorio de A Frouxeira. Me llamó la atención que estuvo más tiempo mirando para el teléfono que por la ventana del hide o atendiendo a las respuestas que le daba. Si el futuro con las aplicaciones de móvil es ése igual no están hechas para mí. Ya se verá.